DIAaDIA recorrió varios supermercados de la ciudad para verificar este incremento. Sin importar la marca, el aumento de los precios que registraban estos productos era notable.

Se observó que en las secciones donde se encontraban el pan y la harina estaba vacía. Allí los compradores apenas verificaban su precio, lo devolvían al instante y optaban por no comprarlo. Otro dolor de cabeza es el precio de la harina, una libra rondaba los 0.75. centésimos, por lo tanto las hojaldres ya no serán las mismas.

“Esto está demasiado caro, ya ni pan se puede comer. Si esto continúa así no sé que será de nosotros, los pobres”, expresó Hermelinda Ortiz, al momento de realizar las compras en un supermercado.

Las “michas” de pan se han convertido en un producto de lujo, puesto que en las panaderías no bajaba de los 10 centésimos una solo pieza. Ni hablar de las flautas que ya cuestan 50 centésimos. En las fondas, la realidad no era tan diferente a la de los supermercados, ya que las hojaldres que antes estaban a 15 centésimos, ahora se pueden adquirir a 0.20 y las empanadas a 0.30 centavos.

Giacomo Tamburrelli, presidente de la Asociación de Panaderos de Panamá, aclaró que de seguir registrándose estas alzas indiscriminadas en el rubro de la harina, los panaderos no tendrán más opción que cerrar sus negocios e irse para sus casas. Aseguró que si esto llegara a ocurrir, muchos panameños humildes se quedarían sin sus trabajos.

PANADERIAS
Las panaderías venderán el pan, de acuerdo con los costos de operación y los gastos que registren en sus locales.