Total descuido. El pasado 13 de marzo, Itza Rivera fue a buscar a su hijo en la guardería Royal School of Canada, ubicada en Los Ángeles, y el pequeño, de tan sólo un año y 7 meses, tenía varias mordidas en su cuerpo.
Al preguntar Itza qué había sucedido, sólo le dijeron que el niño se había caído; ni las maestras ni la directora dieron la cara.
Sin embargo, la hermanita del niño, de 4 años, quien también acudía a la misma guardería, le dijo a su mamá que ella escuchó cuando su hermanito gritaba y lloraba, mientras que la maestra estaba afuera del salón hablando con otras educadoras.
La madre llevó, inmediatamente a su niño al médico, quien le confirmó que eran mordidas de niño y no una caída. De inmediato, y sin pensarlo dos veces, interpuso una denuncia en la Policía Técnica Judicial (PTJ) por maltrato infantil.
Hasta la fecha, la escuela no ha tenido ningún acercamiento con la familia.
QUEDARON SECUELAS
Después de este incidente, el niño tiene temor de jugar con otros niños y niñas, señaló la preocupada madre.
Además de esto, su hermanita también está afectada, por lo que ambos están recibiendo terapias de un psicólogo.
DIAaDIA contactó a Diana Molo, directora de Protección Social del Ministerio de Desarrollo Privado (MIDES), quien manifestó que ya la institución está investigando el caso, para tomar las medidas correspondientes.
El MIDES está realizando operativos en distintos Centros de Orientación Infantil y Familiar (COIF) privados y públicos, y el que no cumpla con las reglas, será cerrado.
REUNION
En la tarde de ayer, funcionarios del MIDES se reunieron con la familia, para darles todo el apoyo correspondiente.
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