Estoy muy sentida con mi hermana por algo que hizo.

Ella siempre fue la consentida y le dieron todo lo que quiso. Yo, en cambio, tuve que luchar para poder estudiar por ser la hermana mayor.

Mis padres ya están mayores y ellos tienen cierta cantidad de dinero y muchas prendas, algunas de ellas centenarias.

Como ella vive con ellos, a pesar de que tiene tres hijos de hombres diferentes, se está aprovechando de nuestros papás. Recientemente, me di cuenta de que ella empeñó unas prendas para darle plata al maleantón con el que anda que de "chiripa", tiene un chorro de hijos.

Cuando la confronté, me contestó que a mis papás no les hacían falta esas alhajas.

Yo tengo ganas de hablar con mi otro hermano para confrontarla, porque no queremos que siga con sus sinvergüencerías.
Adela

ESTIMADA ADELA
Para mañana es tarde. Es tiempo de que confronten a esa hermana que, por lo visto, es caprichosa e inmadura.

No es justo lo que le hace a tus padres que tanto la han ayudado.

Si ella continúa con esa actitud, te recomiendo que tú y tu hermano metan esas joyas en un banco, si sus padres así se lo permiten, para evitar que siga con el despilfarro.

Dicho esto, creo, siento en tus palabras un poco de dolor por las diferencias en el trato, pero tengo que decirte para tu consuelo que gracias a esa educación más recia que te dieron, te convertiste en una mujer decidida e inteligente y que, en cambio, la forma con la que criaron a tu hermana es lo que le ha llevado a ser aniñada.

Míralo desde ese punto de vista y sé feliz con esa fortaleza que con los años te has creado.

Tienes que tomar esto con calma y no aferrarte mucho, ya que a fin de cuentas esas joyas son de tus padres.