Los lugareños venían quejándose, porque estas tierras eran administradas por unas cuantas personas; mientras que el resto de la población no contaba con terreno para sembrar sus alimentos.

Bladimir Riquelme, presidente del comité Higüelos Unidos, dijo que después de mucha insistencia lograron llegar a un acuerdo y finalmente les entregaron unas 50 hectáreas de tierra que podrán utilizar para trabajar y llevar el sustento a sus casas.

Destacó que la cantidad de tierra es muy poca tomando en cuenta que sólo les otorgaron 50 hectáreas de las cuales diez están destinadas a viviendas y el resto debe repartirse entre 60 campesinos que recibirán unos 3/4 de terreno cada uno.