Los mitos se alimentan de recuerdos vivos y de cuerpos jóvenes. Será por esta premisa que mientras Diego Armando Maradona permanecía internado en estado grave en la clínica porteña, las paredes de la Suizo Argentina estuvieron siempre empapeladas de fotos del ídolo, pero la gran mayoría de las imágenes pertenecían a un pasado exitoso bastante lejano del astro futbolístico.

En la Argentina nadie quiere ver a un símbolo caer, y menos aún cuando se trata de un personaje tan "argentino" como "el diez", un ídolo que surgió de la pobreza más profunda y se ganó el respeto de todos.