Marque cada semana en su agenda el tiempo que pasará con sus hijos. Durante ese tiempo, concentre su amor y atención en ellos.

Aproveche el tiempo mientras viaja en auto para hablar con sus hijos. Nadie puede ponerse de pie e irse. Y los niños saben que realmente tienen su atención.

Planee compartir todos juntos en familia, por lo menos una comida por día.

Intente ofrecer su tiempo como un regalo, en lugar de hacer regalos tradicionales para los cumpleaños u otras ocasiones especiales. El mejor regalo que usted le puede ofrecer a sus hijos es su tiempo. Las mejores conversaciones tienen lugar cuando sus hijos están listos para hablar, no cuando usted lo está.

Si tiene varios hijos, trate de pasar por lo menos una hora por semana con cada uno de ellos.

Cuando lleguen las vacaciones, dele una tarea a cada uno de sus hijos para celebrar. Haga que la charla en familia constituya una parte importante de cualquier tipo de vacaciones. Dígale a sus hijos lo importante que son para usted.

Antes de que salgan todos de la casa, tómese un minuto para decir "te amo" a cada uno de sus hijos. Ninguna otra cosa hará que tanto ellos como usted, empiecen mejor el día.