El Rockero falleció el 24 de junio de 2002, luego de un combate de boxeo profesional que se realizó en la ciudad de Las Vegas, Estados Unidos, donde él defendió su título de Campeón Mundial ante el mexicano Fernando Montiel. Alcázar murió a consecuencia de los fuertes golpes que recibió en esa pelea.

Uno de los obstáculos que tuvieron los abogados de los hijos de Alcázar, fue el traspaso del dinero que éste ganó en su última pelea y los seguros de vida de la Organización Mundial del Boxeo, dinero que se encontraba en los Estados Unidos.

Ante esta situación, los abogados decidieron aplicar un fideicomiso con el Banco General de Panamá, para que esta entidad mediara con los abogados depositarios de la cuantía en EE.UU., con el fin de que el dinero fuera enviado a Panamá para ser entregado a los hereditarios. Además de este dinero, los menores también heredaron bienes de su padre.