Armando Davis tiene una meta trazada y no descansará hasta cumplirla. Contó a DIAaDIA que su entusiasmo por la música inició con una discoteca móvil, pero no le resultó como esperaba, pues el público no le quería pagar lo justo por los toques. Sin embargo, eso no obstruyó su pasión por la música.

Así comenzó, luego aprendió a hacer una producción musical con vecinos y otros amigos. Dijo que pagó mil 200 balboas en un estudio de grabación para hacer su producción, pero no la pudo terminar, ya que se quedó sin dinero.

Fue entonces cuando optó por aprender programas de computadoras, se empapó más sobre sonidos, tiempo, ritmo, en fin, todo lo que tenga que ver con música, pero esta vez, música electrónica por la gama de efectos.

Actualmente, tiene dos años de estar haciendo proyecciones de este tipo, tratando de salir adelante, y se desempeña como mentor en el Club House Fe y Alegría, donde se considera un profesional. Allí ayuda a los jóvenes a descubrir sus talentos, les da sugerencias para que sean exitosos. Sentenció que el panameño no ayuda al panameño, debido a que ha metido muchas producciones y sólo lo escuchan y son pocas las que acogen. No obstante, ahora ayuda a otros jóvenes y está seguro de que con ellos triunfará.