Con "Un cuento para cada momento", Anabella de Brostella se estrena como escritora. Su obra, que recoge cuatro cuentos infantiles, está escrita desde una perspectiva psicológica del desarrollo de niños y niñas.
Nace de sus vivencias como madre, de sus relaciones con su familia y de la observación de la rivalidad y competencia entre hermanos.
Quién como Anabella para saber tanto de la conducta humana de los más pequeños, pues es psicóloga y psicoterapeuta de niños y adolescentes.
Su obra, escrita e ilustrada para niños, tiene grandes enseñanzas para los padres que tienen que lidiar con situaciones tan comunes como el hijo o hija que tiene miedo de dormir solo, o los celos ante la llegada de un nuevo bebé.
Durante la presentación de su libro, la autora, con mucha espontaneidad, invitó a los asistentes a preguntarse cómo se sentiría una esposa a la que su compañero le dijera: Como te quiero tanto, ¿qué te parece si traigo otra esposa a la casa para que seamos tres?
La reacción del público se manifestó con una risa generalizada. Pero la especialista y novel escritora abrió el espacio para poder comprender cómo se siente un niño o niña cuando sabe que viene en camino un nuevo hermanito o hermanita.
La obra de Anabella es muy didáctica, con atinadas ilustraciones del artista Simón Atencio.
Juan David Morgan, quien presentó el libro, confesó que al principio quiso declinar porque no sabe nada de literatura infantil.
Pero por la autoridad profesional de la autora, leyó los cuentos y quedó gratamente sorprendido, pues descubrió que en este género, el pleonasmo es permitido y hasta recomendable; las metáforas son prohibidas; y la cacofonía puede usarse favorablemente.
Morgan hizo una síntesis de aquellos cuentos clásicos de brujas y muerte que sólo generan terror en los niños. Se trata de autores que escribían realmente para los adultos, manifiesta.
Pero en los cuentos de Anabella hay color, frases rimadas y una auténtica intención de divertir sanamente.
Un jardín lleno de sorpresas, La ciudad que encontró color y El salto de la ranita son algunos de los cuentos donde se le demuestra a los niños que hay procesos naturales y se le enseña a los padres cómo lidiar con determinadas situaciones.
Con El salto de la ranita, la intención es enseñarle a los pequeños a que si se esfuerzan, pueden lograr saltar muy, pero muy alto, y hacer realidad sus sueños.
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