La granja agrícola Jorge Carles, de Chilibre, fue el escenario para que unos 150 estudiantes con parálisis, de un total de 225 alumnos que asisten al Programa de Parálisis Cerebral del IPHE, vivieran largas horas de esparcimiento al aire libre. Este convivio tuvo entre sus objetivos invitar a otros profesionales sobre la importancia de la población con Necesidades Educativas Especiales (NEE), además de ofrecer oportunidades de relacionarse con otras personas para una mejor adaptación al entorno.

Varios de estos niños tuvieron la oportunidad de montar a caballo y dar un pequeño paseo.

En enero se volverán a reunir nuevamente.