Hola Moza, siempre he leído los consejos que das en tu columna y por un problema que tengo quiero que me aconsejes. Mira, tengo 25 años y una hija. Por una serie de problemas no vivo con el papá, pero él está dispuesto a cambiar para vivir con nosotras nuevamente. Ese no es el problema; sucede que hace un año yo estoy con un hombre, te aclaro, actualmente vivía con su mujer y dos hijos, pero sólo la más pequeña es de él. Trabajamos juntos. El asunto es que se pelearon, ya que ella descubrió que yo existo. Para no echarle largas al tema, él me dice que no la quiere, pero hace unos días regresó con ella; la familia le dice que piense bien las cosas, pero él afirma que ya no la ama.
No te lo niego, ese hombre se ha comportado conmigo como un verdadero caballero, nadie me había tratado así jamás en mi vida.
Él está dispuesto a vivir conmigo. ¿Qué hago? ¿Tú no crees que al regresar a la casa le da esperanzas a ella de arreglar sus problemas?
No sé qué hacer, en unos meses voy a tener mi propia casa con mi hija y como te aclaré al principio, el papá de mi hija no pierde las esperanzas de que yo vuelva con él. Atte, La Desesperada.
CONVERSAR ES LA SOLUCION
Hola Desesperada, me alegra que me escribas, porque me parece que tu confusión te puede hacer cometer un error. Yo pienso que si ese hombre te ama y tú a él, ya es hora de que tome una decisión. Creo que lo que tienes que hacer es hablar con él y decirle lo que deseas de su vida y su futuro. Explícale que si él vuelve a la casa de su esposa y sus hijos, lo que hace es darle esperanzas de que las cosas van a cambiar. Dile que no pueden vivir así, por tu futuro, porque te mereces respeto y porque necesitas una persona que comparta contigo todo el tiempo y lo correcto, no porque quieres seguir siendo la otra.
Mira, si él dice que no puede dejar a su esposa, piénsalo y mejor deja las cosas así, aunque lo ames y sea el hombre más atento del mundo. ¡Ah!, y no decidas por eso volver con tu ex si no estás segura del paso que darás, y mucho menos si no sientes nada por él, porque terminarás fracasando. ¡Suerte!
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