Hola Moza, leí en estos días tu columna en el periódico DIAaDIA y me llamaron la atención los escritos que te mandan y los consejos que tú das. La verdad es que me gustaría que entre tanta gente que te escribe, hagas un esfuerzo por contestarme. En verdad, yo sé que tú te mantienes muy ocupada y que a lo mejor no te das abasto para tanta gente que te escribe, pero me gustaría que aunque sea tarde me contestes.
Quiero que me orientes sobre un hombre con el que vivo, es que es tan exótico para no decir tan raro, pues anteriormente yo estuve casada y mi pareja era muy distinta a él.
El caso es que yo soy una mujer de 33 años y quiero sentir que mi hombre sienta deseos de que estemos juntos, pues él es lo más raro. Él siempre quiere que sea yo la que lo busque y esté encima, que yo haga cosas íntimas que él no hace espontáneamente si no lo pido. Entonces, cuando me quejo por esta situación me dice que yo sí protesto.
La verdad Moza es que yo vivo una vida muy vacía al lado de ese hombre, una vida monótona, sin ilusiones de nada, nunca recuerda mis fechas de cumpleaños, no tiene un detalle para mí; me trata, no como su compañera, sino como su empleada.
Yo trabajo en un salón de belleza hace un mes y prefiero estar trabajando antes que estar a su lado, a veces quisiera dejarlo, pero no me gusta la soledad; además, me da pena con mi hija tener un tercer marido, ella está en la adolescencia y puede hacerme reproches.
Yo no sé qué hacer con esta vida tan vacía al lado de este hombre, yo quiero que me des una táctica para dejarlo. No puedo echar a la borda el poquito de juventud que me queda al lado de un hombre que no me quiere, que no me demuestra amor y sólo está conmigo por una conveniencia. Atte, Margarita.
DEJALO Y PUNTO
Hola Margarita, creo que es peor que sigas a su lado y tu hija vea que eres infeliz. Te recomiendo que le digas lo que sientes, que no puedes vivir así, y como no existe comprensión alguna entre ustedes, es mejor dejar las cosas por la buena.
Mira, no serás la primera ni la última mujer que tenga tres maridos, pero la próxima vez que vas a elegir uno, conócelo mejor y lejos de tu casa. ¡Suerte!
|