Quién iba a imaginar que el amor por una cantante podría terminar trágicamente. Tristemente, esa es la historia de Cucho, un chico peruano de 19 años, quien se suicidó por no haber podido ir a un concierto de la cantante canadiense Avril Lavigne. Al parecer, el chico no había tenido buenos días, ya que acababa de romper con su novia y deseaba asistir a un concierto que iba a ofrecer la cantante. Lo difícil del asunto no era sólo pagar el boleto de entrada al concierto, sino que éste era en Argentina, por lo que también tenía que conseguir dinero para trasladarse de Perú hacia Argentina, y como no tenía plata, no pudo ir.
Para acabar de rematar, Cucho estaba a punto de perder su empleo, por lo que decidió quitarse la vida tirándose desde el octavo piso del edificio donde trabajaba.
Según los padres de Cucho, éste les había pedido dinero para asistir al concierto, pero como las cosas estaban duras en casa éstos no le pudieron correr el gusto.
Aún no se sabe lo que pensará Avril al respecto, pero señores padres de familia, presten mucha atención a esas obsesiones de sus hijos con artistas y, de ser necesario, llévenlos a un psicólogo con tiempo antes de que sea demasiado tarde. ¡Sorpresas nos da la vida!
|