Las protestas no van a parar y se harán diariamente hasta que el Presidente los escuche y conceda indulto a las docentes. (Foto: Elena Valdez / EPASA)
Elena Valdez
| Coclé, DIAaDIA
Respaldo. Molestos, indignados y hasta impotentes, cientos de penonomeños caminaron con pancartas, solicitando un indulto presidencial para las dos maestras que fueron condenadas a nueve años de prisión por violación carnal.
RECONSIDERACION
Más de 600 personas, entre profesionales de la educación, médicos, enfermeras, estudiantes y familiares de las dos maestras condenadas hace unos días por la Corte Suprema de Justicia, protestaron el martes en la tarde por las calles de Penonomé.
Ellos exigen justicia y que se reconsidere esta decisión que no solo afecta a las dos educadoras, sino también a sus hijos menores de edad y a toda su familia.
MAS PROTESTAS
Hoy en la tarde se realizará una manifestación por las principales calles del distrito, para lo cual deben ir vestidos de blanco, con el fin de pedir un indulto al Presidente de la República.
Los manifestantes declararon "non gratos" a los padres de la menor, alegando, que no es posible que sean penonomeños y que aún aseguyren que la niña fue violada, cuando ningún examen lo demostró.
LOS HECHOS
El 13 de noviembre de 1997, el fiscal en ese entonces en Coclé, interpuso una querella contra las educadoras Luz María Ayala y Yariela Gómez, por el delito contra el pudor y la libertad sexual contra una menor de tres años, que afirmaba ser abusada por sus dos maestras en el colegio privado en Penonomé.
LA PARTE ACUSADA
Los abogados defensores plantearon que el Tribunal Superior Cuarto incurrió en error, porque no se tomó en cuenta que la doctora Grimaldo de Sucre, quien atendió a la niña, indicó a la madre que la menor tenía una infección en el área genital, con himen intacto y que debía consultar al pediatra.
FAMILIARES
Los familiares de las docentes están desechos. Aseguran que todo ha sido injusto y amañado, pues la investigación no se llevó de manera adecuada, porque se trataba de la hija del fiscal.
Epifanía Torres, madre de Yariela Gómez, asegura que todo es falso, porque su hija es incapaz de hacer daño a nadie y mucho menos a una niña. "No entiendo porque la justicia no es clara si esa niña no fue violada. Esto aseveran las pruebas y ahora acusan a mi hija y a la otra maestra de violación carnal".