Pagar por un delito en la cárcel no es fácil. Unos reinciden, pero otros reflexionan de manera distinta y tratan de superarse, incluso ayudan a sus familias desde el centro penitenciario.
Esto ocurre en la cárcel de Las Tablas, en Los Santos, donde la Policía Nacional, en conjunto con el Sistema Penitenciario, ha dado la oportunidad a reclusos de confeccionar manualidades y ebanistería, que a su vez se convierte en una fuente de trabajo.
Son ocho reos los que participan del programa, pero para llegar hasta allí tienen que ser evaluados y cumplir con ciertos requisitos, como haber pagado la mitad de la condena y tener un buen comportamiento.
Jenaro y Tedy Díaz son integrantes de ese programa. Ellos manifestaron que también le deben mucho José Rodríguez, quien les enseñó todo lo que saben. El 100% de las ventas es para ellos. Invierten en materiales para seguir trabajando, pero también ayudan a sus familias.
Venden el par de guacamayas pintadas en B/15.00; los barriles, entre B/.25.00 y B/.30.00. También hacen camas, gaveteros, sillas y tablas de planchar, entre otros. Ellos trabajan de 7:30 a 4:30 de la tarde.
|