Por culpa de los ladrones. El centro de salud de Curundú suspendió temporalmente las atenciones médicas a toda la comunidad, porque se han robado los cables, tubos de los aires acondicionados y aparatos.
Ricardo Powell, director encargado del local, tomó esta decisión por la mala condición del lugar, puesto que la comunidad no coopera en su cuidado.
Afirmó que no están en la capacidad de brindar atención a los pacientes, por lo que el lunes se reunirán con autoridades de la Policía y con miembros del comité de salud para buscarle solución al problema.
A los galenos les han vandalizado sus autos, al igual que que el bus que transportaba a los funcionarios cuando daban charlas en la comunidad.
Además, los funcionarios se quejan de las constantes balaceras que se dan frente a las instalaciones.
Hercilia Labrador, del comité de salud, dijo que han dado charlas para concienciar a la comunidad, pero no ha resultado.
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