Señora Moza, gracias por su gentileza de permitirme decirle mis sentimientos.
Yo estoy enamorada de un hombre que en un principio se comportó como un príncipe, pero ahora todo cambió.
Nos conocimos hace tres años en una actividad de nuestro trabajo, yo era nueva y él ya trabajaba ahí. Yo estaba algo enredada, pero observé que era guapo, aunque solo lo dejé hasta ahí.
Varios meses después y tras mucho cortejo de su parte, nos hicimos novios. Él fue siempre cariñoso conmigo, aunque nunca nadie supo de lo nuestro, por eso de que trabajábamos juntos.
Yo cambié de trabajo y a partir de ahí comenzó nuestro distanciamiento.
Ya no me llamaba como antes y dejó de visitarme. Como en su área de empleo debe hacer giras, se quedaba días con el celular apagado. Eso me fue dando malas señales.
Lo triste es que tenemos más de quince días sin hablar y ni él me llama ni yo lo llamo, creo que esto marca el final de nuestra relación. Yo le dejé un mensaje para que me dijera la verdad, si era que ya no me quería, pero lo único que obtuve fue silencio. Lo malo es que no entiendo qué hice mal, si yo lo único que hice fue quererlo, y creo que me quedé con las manos vacías y con una sensación en el cuerpo de que fui una tonta. Marta
ESTIMADA MARTA
Lamento lo que te está sucediendo. Se nota que has querido mucho a ese chico, pero debes comprender que el cariño no es algo que podamos atrapar.
Te recomiendo que no lo llames, eso sería humillarte, él usó la salida más cobarde, la de no darte la cara ante el hecho que te olvidó.
Sé que ahora sufres, pero un día te despertarás y te darás cuenta que lo olvidaste y lo más seguro es que Dios te premie con un amor sincero. Mira, no fuiste una tonta, simplemente amaste, y no creo que alguien lo pueda querer a él con la sinceridad y la entrega que lo hiciste tú.
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