Me acabo de separar de mi marido, porque me hizo la peor de las traiciones. Llevé a mi hermana a vivir conmigo porque somos del interior y ella entró a la universidad.

Al principio noté que mi esposo no estaba de acuerdo, pero lo convencí de que la dejara estar ahí.

El detalle es que desde hace cinco meses comencé a ver un cambio de actitud en ella. Cuando alababa una de sus virtudes, hacía una mueca burlona.

Él tampoco estaba igual, siempre estaba cansado. Como no soy tonta comencé a investigar, y descubrí que mi hermana lo alcahueteaba para que saliera con una de sus amigas mientras que ella salía con un compañero de trabajo de él.

Mi ahora ex me pidió perdón, pero lo eché de la casa y con mi hermana no se qué hacer, porque mi familia quiere que viva conmigo, pero aún no saben nada. Lo peor fue que leí una carta en la que escribió que me quería, pero a la vez me odiaba, porque mi vida era casi perfecta, mientras que ella fue siempre el patito feo. Estoy que me muero.

F.I.T

Estimada Fit. Es realmente doloroso lo que estás viviendo, porque recibiste la traición de dos seres a los que quieres.

Por tu salud mental debes sacar a tu hermana de tu casa y contarle a tus padres lo que está sucediendo. Ella por lo que veo tiene muchas heridas emocionales y se comporta de esa manera, porque en tu familia, quizás te pusieron siempre de ejemplo; no obstante, eso no le da derecho a hacerte lo que te hizo.

Sobre tu esposo, hiciste bien en deshacerte de él porque te engañó con tan poco tiempo de estar casados.

Lo único que te pido es que no te amargues, mira lo que te sucedió como una prueba de vida para probar de qué material estás hecha. Yo sé que más temprano que tarde encontrarás a alguien que verdaderamente valga la pena, porque tienes muchas cualidades que hacen ser una buena compañera para compartir la vida.