Por mucho que se diga que no, sí estamos carentes de proyectos que resaltan valores, lo positivo que tenemos como país y como sociedad. Nuestros medios, incluidos radio, periódicos, páginas Web's y televisión, han decidido resaltar lo malo, apostar a lo vulgar, a lo que no aporta, a lo que no educa, a lo que no entretiene, y sí, algunos hasta a hacer apología del delito. Aunque en este país no todos somos malos, los malos resaltan más.

El lunes quedé de una pieza cuando en la contraportada de Día a Día apareció una curvilínea colombiana resaltando sus evidentes bondades y, según algunos nacidos en ese país, resaltando la bandera de su provincia rebelde: Panamá, en el mes de la patria. Ella era parte del 'Colombia Bikini Open', evento dentro de La Feria de la Rumba que por sexto año organiza el programa 'La Cáscara'.

Sí, la chica está buenísima, nadie lo duda, pero es inaceptable, desde cualquier punto de vista, el mal uso de nuestra bandera, y mucho más si se utiliza como 'tapa vagina', porque el rabo ya lo tenía al aire. Esto no tiene nada que ver con ser puritanos, con libertad de expresión y mucho menos con ser santos. Esto tiene que ver con coherencia, con respeto a nuestros símbolos patrios.

Yo, con todo lo que admiro el trabajo creativo de 'los cascarosos', no puedo pasar por alto lo que considero su mayor metida de pata. Sí, se resbalaron en su propia cáscara porque ellos, como organizadores de esa actividad y como panameños, tienen la obligación con su país y no con su bolsillo ni con su lujuria de respetar y exigir respeto –a nacionales o extranjeros- a los símbolos patrios que, además, así lo dicen las leyes de este país.

Lo sorprendente es que aquí hubo gente tan irresponsable, como Agustín Clement, del programa 'A Gusto' (Canal 21), -que por cierto ha trabajado en Cancillería y sabe lo que se permite y no con la bandera de este país-, que dijo, con su mente liberal, que no le veía nada de malo a esto. Sí, entiéndase que él defendió el derecho de hacer lo que se quiera con la bandera en nombre de la libertad. ¡Señor, esto no es Estados Unidos, aquí hay regulaciones que se tienen que respetar! Él tiene todo el derecho a pensar así, pero no puede, siendo el anchor principal de una revista mañanera que va dirigida a la familia, a la gente del hogar, decir semejante invitación a irrespetar las leyes de este país. Esto es lo mismo que si Zoila Lumbrera invitara a los menores a tomar tragos. ¡Qué decepción!, por suerte, sus compañeras Nadya y Romina no lo apoyaron en semejante aberración.

En este país le hemos permitido todo a 'La Cáscara' porque se han atrevido, con su estilo, a decir lo que muchos piensan y que por hipócritas se quedan callados o no tienen el medio donde decirlo, pero esta vez se pasaron y la responsabilidad de este irrespeto, personalmente, se lo achaco todo a ellos como organizadores. Lo mínimo que espero de 'La Cáscara' es la no divulgación este sábado de estas imágenes, porque hacerlo es reafirmar el poco importa a nuestros valores, ya de por sí pisoteados por muchos políticos que tanto ellos critican. Es decirnos vamos a hacer lo que nos dé la gana con los símbolos patrios y esto no va nada acorde con la campaña institucional de TVN sobre el amor a Panamá. Presentarlo sería decir que el Canal apoya también el irrespeto a nuestros símbolos patrios, y créanme que eso no va de la mano con eso que reza: 'Es tuyo, es mejor'. ¡Toma nota, Davis!