Moza, es triste lo que te voy a contar, pero es la realidad de mi vida. Soy una joven que nunca ha podido ser feliz porque un desgraciado me hizo daño. No hay nada peor para alguien que una persona en la que confías te haga daño. Lo que pasa es que cuando tenía 19 años fui al ginecólogo a hacerme un chequeo, ya que quería atenderme una infección en las vía urinarias, y para mi sorpresa, el doctor me dijo que me revisaría. Yo le dije que era virgen y que no me sentía cómoda con la situación, que prefería que me atendiera una doctora, hasta le dije que si no me podía recetar algo sólo para aliviar la infección, pero él me dijo que no y que tenía que revisarme. Luego de darme una charla de un par de minutos, le dije que estaba bien y le dijo a la enfermera que buscara no sé qué. Bueno, yo me desnudé y allí fue que ocurrió todo. Todavía tengo en mi mente lo ocurrido. Le decía que me lastimaba, pero él estaba callado, cuando me percaté de lo ocurrido me di cuenta de que no tenía guantes y que tenía una erección. Me puse histérica, y él me decía que yo estaba loca y que me fuera de su consultorio. Al entrar la enfermera le dije lo ocurrido y ella se quedó callada, como que él ya tenía esa costumbre. Moza, han pasado dos años y ni siquiera he podido entregarme a mi novio, cada vez que estamos en el momento, me pongo fría y no puedo. Necesito ayuda, lo sé, pero me da vergüenza decirle a alguien que me quedé callada con la situación. Por favor, ayúdame, quiero ser una mujer plena y disfrutar de mi sexualidad. C. P. H.
BUSCA AYUDA
Por vergüenza te pasó lo primero, y ahora por la vergüenza no puedes recuperarte de lo ocurrido. No te sientas mal, estabas asustada y es por eso que no pudiste afrontar la situación, pero ya es hora de que lo hagas para que puedas ser feliz. Habla con un psicólogo, verás que te sentirás mejor, y si te acuerdas del nombre del doctor, denúncialo para que eso no le pase a otra chica. Tranquila, verás que todo esto pasará muy pronto. ¡Suerte!
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