Acostada en un colchón desgastado, sin poder hablar ni jugar, encontramos a Milagros del Carmen Amaricia Aparicio, de 11 años. Esta pequeña sufre una enfermedad degenerativa que se le detectó a los seis años, la cual provoca que poco a poco vaya perdiendo sus sentidos.
Sus necesidades son muchas, empezando por su casa, que es de zinc, piso de tierra y el techo tiene agujeros.
A los seis años de edad era una niña normal, asistía a la escuela y obtenía buenas calificaciones; era alegre, cariñosa y le gustaba hablar.
Milagros no vive con sus padres, ellos la dejaron al cuidado de un familiar, Clementina Amaricia, en Membrillal de El Roble de Aguadulce. Esta humilde mujer decidió hacerse cargo de la infante desde que su madre se fue para Chiriquí.
Cuando vivía con su madre, se encontraba delicada porque no recibía la atención médica adecuada, le daban muchas convulsiones. Una vez su madre se fue y la pequeña quedó hospitalizada por tres meses en el Hospital del Niño, los médicos no le daban esperanzas de vida por el estado en que se encontraba. Desde entonces, Clementina no la ha dejado; gracias a su cariño y cuidado, logró recuperarse.
CARENCIAS
La principal necesidad de esta familia es una vivienda que tenga piso de cemento, un baño adentro, ya que se les complica bañarla; no aguantan el calor en el verano y esto le causa molestias porque también sufre de asma.
Además, le urge un colchón ortopédico, un coche para trasladarla, pañales desechables, leche, dinero para comprar los cuatro medicamentos, porque no tiene seguro social.
Con voz entrecortada, Clementina señaló que muchas veces no tiene para comprar los medicamentos y que su esposo no cuenta con un trabajo permanente, por lo que sale de su casa para hacer cualquier trabajo con tal de que a la criatura no le falten sus medicinas.
Milagros perdió una cita médica (16 de octubre de 2009), en el Hospital del Niño, porque no tenían dinero para el transporte.
La señora Clementina desea tener pronto una casa con todas las comodidades para atender mejor a Milagrito, sobre todo en este mes no pierden las esperanzas de tener un feliz año nuevo.
A través del representante del lugar se ha solicitado apoyo al MIDES y al Ministerio de Vivienda, pero la ayuda aún no llega.
|