La esquina
|
Redacción
| DIAaDIA
|
No hay peor ciego que el que no quiere ver. Y esto se aplica a quienes en estos tiempos en que las emociones se desbordan y el acto de dar se exalta, caemos en el consumismo, que más que beneficiar a quienes reciben regalos, llena las arcas de unos pocos con mucho poder adquisitivo. El quid del asunto está en saber mantener un equilibrio entre el sentido moral y espiritual de estas fechas, y el deseo de demostrar, con un obsequio, el amor que sentimos por nuestros seres queridos. ¡Mucho ojo con esto!
|
|