El segunda base de los Orioles de Baltimore, Brian Roberts, admitió haber usado esteroides, tal como quedó reflejado en el "Informe Mitchell", pero insiste en que lo hizo sólo una vez antes de darse cuenta de que fue "una terrible decisión".

"En el 2003, cuando me pusieron una inyección de esteroides, inmediatamente pensé que eso no era lo que realmente yo quería hacer, o algo que me habría gustado continuar haciendo", dijo Roberts.