Todo por una regata. Eran cerca de las 11:00 a.m., cuando más de 60 personas viajan a bordo del bus de la ruta Panamá Viejo - Ave Balboa que se volcó en la Cinta Costera, próximo al Hospital del Niño y el Santo Tomás, nosocomio que ayer no contaba con servicio de electricidad.
Los pasajeros notaron que el conductor Eliécer Elías Guerra Singh, de 21 años, aumentó la velocidad junto a otro conductor, cuando pasaron por El Mercado del Marisco. Las protestas por la velocidad no se hicieron esperar, pero éste hizo caso omiso.
Dalys Mc. Leod tomó el bus en El Chorrillo para ir a su trabajo en Paitilla, al sentir la velocidad temió por su vida. "Sólo sentí cuando el bus impactó con algo y después dio como cinco vueltas. Le caí a varias personas y dos me cayeron a mí. Fue horrible ver las mujeres embarazadas, los niños que lloraban tras estar asustados y creer que íbamos a morir", narró.
Las personas, desesperadas por salir del bus, pisaban a quien fuera. La mayoría salió del vehículo por la parte de atrás.
Al salir del bus vieron el panorama, y es que se salvaron de milagro. El bus había chocado con un poste de luz y estaba volcado en la entrada de la plaza central de la cinta costera, donde los que hacían ejercicio corrieron a auxiliarlos, incluso el director de la Policía fue testigo de todo.
Cuando se pensó que todos habían salido, estaba un hombre quejándose, porque no podía sacar su brazo derecho que quedó debajo del bus. Por más de 30 minutos los hombres que estaban en el lugar hicieron fuerza para levantar el vehículo y así los paramédicos y bomberos lo sacaron.
En tanto, Guerra Singh, conductor del bus, fue puesto a órdenes de las autoridades del Tránsito y Transporte Terrestre (ATTT), y es que, según explicó Marcos Mora, éste tenía licencia particular, y no la profesional que se requiere para conducir buses.
UNO GRAVE
Según informes de Roberto Mitre, subdirector médico de la Caja de Seguro Social, allí atendieron a 58 personas que presentaban lesiones menores, y sólo el joven cuyo brazo quedó atrapado tenía lesiones de gravedad. De los pacientes, siete fueron trasladados al Hospital Santo Tomás, donde se restableció el fluido eléctrico en algunos de los departamentos, pues se había suspendido justamente el sábado para instalar una planta de electricidad.
SANCIONADO
Al dueño del bus B- 388 se le canceló el certificado de operaciones y no recibirá la compensación de B/25.000.
Eliécer Guerra no tenía la licencia correspondiente.
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