Pero el agua también puede ser peligrosa (en casos de accidentes como calambres, golpes, etc.), y en especial para los niños. Por eso, cada vez que nos aproximamos a las parte profundas, debemos ser muy precavidos.

Los flotadores nos aseguran tranquilidad cuando nuestros hijos juegan en la piscina. Este elemento acuático le ha salvado la vida a muchos individuos, en especial, a niños.

Aunque tengamos conocimientos acuáticos, nunca está de más contar con flotadores o elementos inflables; una pelota de playa, una ballenita de juguete con las mismas características, etc.

De todas maneras hoy el mercado presenta una amplia gama de productos flotantes, como el denominado flotador gigante, los cinturones flotantes y los flotadores para bebés.

LOS DE MODA
La modalidad de flotadores de asiento son ideales para que los niños no se deslicen hacia abajo y para que su estabilidad sea mayor, aunque no son recomendables para bebés menores de 4 meses que aún no tienen la espalda preparada para permanecer erguidos.

En cualquier caso, es evidente que siempre hemos de permanecer junto a ellos, incluso ayudándoles a que no hagan movimientos bruscos que hagan peligrar su estabilidad. Lo mejor es comprarle un flotador.