En este mundo ni los famosos de Hollywood se salvan de la crítica. Acaba de relucir que la revista Vogue no quería sacar a Sienna Miller en su portada del 2007, porque la consideraron muy dientona y despeinada. Así es, después que llamaron a la famosa actriz, la editora de Vogue, Anna Wintour, no sabía qué hacer, porque al parecer, la actriz tenía más dientes de lo normal. ¡O sea!
Lo peor es que esta historia se puede apreciar en el documental "The September Issue", presentado en el Festival de Cine de Sundance. En él podemos observar a los empleados de la revista Vogue, quienes se desesperaron con Sienna para la edición de septiembre 2007. Según ha señalado un espectador, "Anna se queja todo el rato de que Sienna tiene demasiados dientes y a sus empleados les preocupa que tiene muchos empastes (calzas). Además, los directores le insinúan que se corte el pelo, pero ella les ignora". ¿Qué dirá Sienna de todo esto?
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