Así lo destacó el viceministro de Finanzas, Dulcidio De La Guardia, quien ayer presentó este documento y manifestó que el motivo de las nuevas reglas del juego en el ámbito fiscal ayudará a los panameños a tener una mejor calidad de vida.

Se estima que con estas medidas el Gobierno pretende adquirir ingresos por el orden de 200 millones de dólares anuales.

Curiosamente entre los productos por los que se cobrará un impuesto ahora están los teléfonos fijos, los restaurantes, lubricantes de autos y las sodas.

Entre los programas que se beneficiarían del aumento de impuestos están la Red de Oportunidades, el programa 100 a los 70, intereses preferenciales hipotecarios, subsidio eléctrico a quienes consumen menos de 500 kW/h, subsidio al gas de 25 libras, la entrega de libros, uniformes y útiles escolares; además de becas universales para los estudiantes.

Se tiene previsto que este proyecto de reformas tributarias, que destaca el incremento del 5% al 7% del ITBMS, llegue a la Asamblea Nacional de Diputados después de los Carnavales.