Una de las denuncias recibidas a este medio recae en el pago por medio de gallinas, ñame, yuca, maíz nuevo, entre otros productos que cultivan nuestros campesinos para poder cancelar la deuda de un enfermo.

De acuerdo con una persona que llega a diario al centro médico, el peso del producto aporta a la deuda que se tiene con el hospital.

Entre las quejas se menciona, además, el trabajo de ornato y aseo que tienen que realizar los familiares de los pacientes, para cancelar las cuentas de hospitalización.

En una reciente visita al hospital, sólo se pudo ubicar al personal de aseo del hospital realizando sus labores rutinarias en los pasillos y salas, no así a los campesinos.

El doctor Francisco Navarro, director regional de Salud de Coclé, informó que entre los años 2000 y 2004 se tenía esto por costumbre en el hospital, para aquellos pacientes que no podían cubrir el costo de los gastos de hospitalización.

Aseguró que esa situación no se está dando desde hace años, y que si alguien conoce de un caso que presente la denuncia.

CALOR
Otro de los problemas que se tiene es la falta de acondicionadores de aire, en dos salas de hospitalización. En las habitaciones, que pasan las 15, hay seis camas en cada una. No todas están ocupadas, pero lo evidente son las ventanas abiertas.

El resto de las áreas del hospital sí cuenta con aire acondicionado, entre ellas administración, maternidad, la sala de neonatología y el cuarto de urgencias. Los familiares tienen que llevar abanicos para que los pacientes la pasen mejor.

Según el doctor Navarro, el hospital no está diseñado para tener aire acondicionado en las salas de hospitalización.

Para el presupuesto de este año, al hospital se le asignó una partida mayor a la del año pasado, que fue de alrededor de 700 mil dólares. El ministro de Salud, Camilo Alleyne, confirmó que en esta oportunidad la partida destinada al hospital, supera el millón de dólares y que se tiene programado solucionar todos los problemas que presenta este centro médico.