Todo empezó con "Ya tú sabes quiénes son... Comando Tiburón". Los pela'os pusieron al público a brincar, a gozar y más, digo, ¿cuándo no lo hacen?

Con todo y que estaban apurados, Rolo, Magnético, Flecha y Phantom se tiraron un "showsazo". Hablando de Phantom, les cuento que no se ha despegado del Comando durante estos carnavales; según Rolo, Phantom es parte de la familia.

MALA COMBINACION
Después de una larga espera el show continuó, pero no con José Alberto El Canario, como estaba estipulado en la agenda de la tarima, sino con la participación de Bobby Valentí­n y Roberto Roena.

Valentí­n es reconocido como uno de los mejores bajistas y trompetistas, y qué les puedo decir de Roberto Roena, destacado bongosero. Tal vez para el público que ansiaba la aparición de Tito El Bambino, no eran la gran cosa, pero son grandes salseros que merecen un aplauso, ya que se comportaron a la altura para entrar como emergentes.

Según los organizadores del evento, El Canario no pudo estar en tarima porque parte de su orquesta no habí­a llegado. ¡Qué lástima!

EL BROCHE DE ORO
La algarabí­a del público volvió a resurgir cuando Moisés Rodrí­guez, presentador de la tarima, anunciaba que era el turno de El Bambino. Los alaridos y la euforia se apoderaron del público, en su mayorí­a chicas, cuando el chiquito salió, porque Tito no es tan alto, las bardas de la cerca se querí­an venir abajo. Todo comenzó con "Caile, caile, que yo quiero una noche más...".

Antes de que El Bambino pisara la tarima tuvo una conversa con los medios nacionales, durante la que comentó que dentro de dos meses pretende tener un concierto en Panamá, al lado de Tego Calderón. ¡Ye, ye!