"Veo que hay demasiado desorden, mucha vulgaridad, eso antes no se veía, era algo más serio", comentó.

Recordó la cantalante que se comenzaba más temprano, que había un sarao que empezaba al mediodía y se extendía hasta las cuatro de la tarde, seguidamente salían las tunas hasta las 8: 00 p.m., cuando arrancaba el baile y a golpe de madrugada, volvía y salía otra tuna a puro repique de tambor. ¡Qué rico!

Lucy también destacó que los hombres de antes no eran tan "pilinquis" como los de ahora, que les regalaban mazos de velas y si una muchacha les gustaba bastante, le lanzaban perfume. Ella, incluso, afirmó que en muchas ocasiones tuvo que irse a cambiar la ropa a su casa porque quedaba toda empapada. ¡Ohh!

Sobre los tamboritos que cantaban, nos contó que uno de los más populares era Martes al amanecer, tema que se encuentra en su más reciente producción Tradición y Folklore de mi tierra, que salió al mercado recientemente y que tiene entre otras cosas una batería de tamboritos, fotografías y un documental con la vida de la artista, en el que se aprecian muchas anécdotas y testimonios que les permitirán tener una idea más clara de lo que son nuestras costumbres y tradiciones para el área de Azuero. ¡’Ta bueno, verdad!