Algunos residentes se oponen rotundamente, porque parte de los arreglos consiste en la colocación de un techo que dificulta la visibilidad en el área.

La preocupación de los afectados es que al utilizar el puente, por la falta de visibilidad se convierten en presa fácil de los delincuentes que se paran allí por las noches para robarles.

"Con techo o sin él aquí siempre roban", expresó Marta Villarreal, residente del lugar, quien piensa que la solución no es parar el proyecto.

Luis Castillo, administrador de la Junta Comunal del sector, reconoció que la ola de violencia se ha incrementado en la comunidad, de allí las quejas de los moradores.

Destacó que están conversando con ingenieros encargados de arreglar el puente para que el techo que ya fue colocado se modifique para que se puedan instalar las luminarias.

Además se reforzarán las barandas y el piso para beneficiar a cientos de estudiantes de primaria que por allí pasan diariamente.

PROYECTO
Las reparaciones del puente se hicieron con los fondos del Proyecto de Desarrollo Educativo (PRODEC).