Esta es la historia de Omar Oses, juvenil pelotero coclesano, que le espera un gran reto por delante, por haber firmado para jugar pelota profesional con los Tigres de Detroit.

Oses es un chico que nació con un bate y una manilla en las manos. El béisbol es un deporte que le corre por las venas y le apasiona.

"Es un deporte que lo vivo con intensidad. Mi fuente de inspiración fue mi padre y mi primo, cuando los veía jugar softball", indicó.

Este espigado pelotero (6 pies de altura) ha demostrado ser uno de los mejores bateadores en los pasados torneos juveniles e intermedio.

En el torneo juvenil, Oses estuvo luchando por el campeonato de bate y terminó empatado en el segundo lugar con el chiricano Franklin Moreno, con promedio de .406.

"No me considero un gran bateador, pero si soy paciente y busco el mejor lanzamiento para hacer contacto", señaló el pelotero.

MASCARA LIDER
Es un receptor nato, es un líder dentro del diamante y es el centro del juego detrás del plato.

La garra de Omar está en dirigir a los lanzadores. Al infundirse la armadura de receptor, este chico tiene un cambio de 180 grados. De un muchacho de pocas palabras, se convierte en general de guerra.

La receptoría es una de las posiciones más difíciles del terreno de juego. ¿Qué habrá llevado a Omar a ser receptor?

Comenta que es una posición de liderazgo. "Desde siempre me ha gustado jugar allí. El receptor es el cerebro del juego, el que se da cuenta de todo, desde allí se vive mucha adrenalina", aseveró.

Agregó que a pesar de ser una posición exigente, hace el trabajo con gusto.

ES UN SUEÑO
Oses en cada salida al terreno daba un cien por ciento, sin pensar en ningún momento, que lo hacía para ser firmado.

"Como dije, disfruto de este juego, hago las cosas por amor al deporte, la firma es un sueño que logré y quiero despertar cuando esté en las grandes ligas", señaló

ÍDOLO
Omar Oses confesó ser fanático de Carlos "Calicho" Ruiz, porque el jugador es todo un líder dentro del cuadro.