Parte alta del sexto episodio. La algarabía con el nerviosismo se apoderaron de repente del estadio Eric Del Valle en David, Chiriquí.
Los chiricanos brincaban en un solo pie porque la "Copa Heriberto Espinosa" estaba prácticamente en sus bolsillos a falta de dos outs para finalizar el partido. Ganaban 1-0; sin embargo, en el ambiente se respiraba un olor a peligro, debido a que Panamá Metro amenazaba con dos corredores en los senderos y su cuarto bate, el hombre del poder, Sergio Rivera, estaba en el cajón de los bateadores.
La fanaticada chiricana pedía que se boleara a Rivera, pero antes de que alguien reaccionara el primer lanzamiento ya venía para el plato... ¡swiiing y pa’ la calle! Rivera cambió la historia del juego sepultando las aspiraciones de los hijos de "El Valle de la Luna".
Metro se coronó campeón del XXIX Campeonato Nacional de Béisbol Infantil, al ganar 5 carreras por 1.
"Estaba concentrado en sólo dar un imparable como me dijo mi director. Gracias a Dios salió el cuadrangular y le di la victoria a mi equipo", dijo ayer Rivera, a través de RPC Radio.
A parte de Rivera, otro que brilló con luz propia fue Oriel Caicedo, al trabajar la ruta completa, con una anotación permitida, cuatro hits y ocho ponches.
La derrota cayó en los hombros del abridor Juan Malek, quien permitió el cuadrangular de Rivera.
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