Lo que pasa es que soy recepcionista de una compañía muy importante y cuando ese chico llegó, me tocó saludarlo porque tenía que contestar todas sus preguntas.

Pero, ¿qué crees? No pude responder, me quedé tan pasmada que sólo pude contestar con una tierna sonrisa.

Mi compañera me hizo el favor de contestarle y hacerlo pasar.

Cuando ese chico salió, yo estaba almorzando, dice mi compañera que se despidió con un hasta pronto y luego cuando llegó a la puerta regresó para preguntar dónde estaba yo. Ella le dijo que almorzando y él preguntó ¿dónde?, pero como no dije a qué lugar iba, no le pudo responder.

Parece que él también ha quedado flechado, porque pidió mi nombre y teléfono.

Para no alargarte el cuento, me llamó y me invitó a salir el próximo martes, lo que no sé es ¿qué hacer? De veras me gustó.
Chao, Pilar

ARRIESGATE
Hola Pilar, me alegro mucho de que me hayas escrito y espero que sigas tan entusiasmada como hasta ahora. Me parece que es muy bonito lo que me cuentas, porque hace unos años conversé con un hombre, quien es mentalista y me explicó, que todas las personas tienen un alma gemela y que en el momento indicado lo reconocerán.

Con esto quiero decirte, que tal vez ese chico es tu alma gemela y no debes dejar pasar esa oportunidad. Me parece que debes aceptar su invitación, porque estoy segura de que te irá muy bien con él. Sólo para que sepas, yo conocí al amor de mi vida así y, desde el primer día, supe que compartiríamos todo. Inténtalo, nada pierdes, ya que el que no se arriesga nunca tiene nada. ¡Suerte!