• Si no posee suficiente conocimiento sobre los platos, lo adecuado es pedir asesoramiento a los profesionales de la sala. También, es preferible preguntar el significado de algún término de la carta que se desconozca, con el fin de evitar desagradables sorpresas.
• No empiece a comer hasta que la comida de todos esté servida.
• Cada cubierto tiene una misión (por ejemplo, el de la mantequilla es sólo para eso). En cuanto a su utilización, se comenzará por los que están situados más al exterior y de ahí hacia el centro.
• El pan de cada comensal es el que está situado a su izquierda.
• Al terminar el plato, los cubiertos se dejarán en el centro y juntos, en posición vertical. Si los coloca apoyados a ambos lados del plato o en la mesa y le queda comida, el camarero interpretará que no se ha terminado de comer.
• En cuanto a la propina, aunque no es "obligatoria" sí se considera de buena educación darla.
• Si un pedacito de alimento se ha metido entre sus dientes, discúlpese y vaya al baño a quitárselo.
• Tampoco es correcto beber ningún líquido mientras se tenga comida en la boca.
• No utilice el mantel o la servilleta para limpiar los cubiertos. Si están sucios, pida que le traigan otros.
• Si desea probar la comida de otro comensal, evite hacerlo cogiendo un poco con el tenedor y llevándolo por encima de la mesa hasta su sitio. Es más correcto pasar el plato de pan a esa persona y pedirle que deposite ahí unas cucharadas o trozos del alimento que desea probar.
• La comida la servirán por el lado izquierdo del comensal y se retirará por la derecha. Siempre se deberá facilitar esta labor a los profesionales de la sala.

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