Ante los cuestionamientos que se hacen a la Iglesia Católica por los pagos de ciertos servicios, Monseñor José Domingo Ulloa, Arzobispo electo de Panamá, aclaró que los cristianos y católicos deben ser corresponsables con las obras de las Iglesia. "No se paga por los sacramentos. Cuando los feligreses hacen algún tipo de pago, estos son realmente apoyos a los gastos de la iglesia para poder mantenerse", indicó, y agregó que no son los sacerdotes los que administran estos dineros, sino los laicos y comités económicos.
Ulloa también se refirió al alejamiento de los fieles de las diferentes religiones afirmando que estos son signos de los tiempos con ataques a la Iglesia Católica y a otras religiones, pues hay gente que le interesa que Dios no sea el centro y esto es el reflejo de la violencia y las aberraciones que hay en el mundo de hoy.
En tanto que, según cifras emitidas por la Contraloría General de la República, 286,005 panameños aseguran que no pertenecen a ninguna agrupación religiosa.
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