Sin embargo, que se le diera de alta ayer, y que llegara a tocar en Ocú fue imposible, ya que sigue recluido en el Hospital Joaquín Pablo Franco Sayas de Las Tablas, bajo instrucciones del doctor, quien prefirió que guardara reposo durante el fin de semana.

Según su esposa Mari Rosa, lo que sí extraña "El Poste" es la comida, pues como lo tenían a punta de líquido, sentía mucha hambre. Pero ya le dieron comida de la buena. Por lo demás, todo está bien, gracias a Dios.