La escritora Lil María Herrera expresa su parecer sobre este montaje: "La disfruté tanto, al punto donde la indignación convierte a la carcajada en un rictus antónimo. Es para mí una obra profundamente filosófica, existencialista, antropológica, sociológica, psicológica, atrevida, juguetona, subversiva, honesta, nada pretenciosa; con un montaje lúdico que impacta, involucra a la audiencia y cobra vida con las EXCELENTES actuaciones de Nyra Soberón Torchia y Teresita Mans, acompañadas por Charlie Sotelo, John De León y Arturo Wong Sagel..."

La obra presenta contradicciones sociales, hace denuncias de la sociedad materialista, fatua, trivial, mediática, del doble estándar que prevalece, el comodismo y más.