El pasado 28 de febrero, "Lucho" pateó una lechuza en el partido entre Junior en el Metropolitano, lo que lo convirtió en protagonista de un escándalo nacional.

La multa correspondió a siete fechas fuera de las canchas de juego en Colombia y 15,000 dólares. La sanción fue impuesta por el Departamento Técnico Administrativo del Medio Ambiente de Barranquilla; el sábado pasado, el jugador presentó documentos ante la Corporación Autónoma Regional del Risaralda y espera que se le dé respuestas en los próximos días.

Para el representante legal de la institución matecaña, Mario Arboleda, este tipo de sanciones es exagerado, puesto que "ante un juez de la República uno pide autorización para pagar perjuicios morales por la muerte de un familiar o persona y escasamente sancionan por 20 ó 30 salarios".

Finalmente se conoció que el club asumió en su momento todo lo relacionado con el tema de la lechuza y la competición para no dar tanta relevancia al hecho, por lo que no se siguió ningún procedimiento de reposición.