Tenía dos días de no probar bocado, y con temor a que los "piedreros" le hicieran daño.
Se trata de Athelstan Scantlebury Bowen, un anciano de 80 años, que asegura fue un lanzador en las filas de Pittsburg, mientras que en el ámbito local formó parte del equipo de la Cervecería Nacional.
Scantlebury reside en la casa 7228, en la calle La Pulida de Río Abajo. Un grupo de vecinos, al descubrir este cuadro patético, llamó a la redacción de este diario para que presentara este caso a la ciudadanía.
Este lanzador expresó que desde que vendieron la finca donde reside y en la que por muchos trabajó dándole mantenimiento, los piedreros han ido desvalijando poco a poco la casa. El espacio donde duerme es reducido. El mal olor y la humedad provocan náuseas.
El anciano Scantlebury contó que un abogado vendió la finca y no le han dado ni un centavo por los servicios que ofreció. Para colmo, el abogado le prometió que lo llevaría a una finca en Campana, pero no confía en esa propuesta y considera que "lo que quieren es dejarme en el abandono".
Al menos pide que lo lleven a un asilo. Los vecinos agregaron que, de este caso, tiene conocimiento la trabajadora social de la Junta Comunal de Río Abajo y no se ha hecho nada.
El anciano contó a DIAaDIA que a pesar de su ceguera, cocina en un fogón y se abastece del agua que acumula en un tanque oxidado.
Scantlebury aseguró que fue un gran beisbolista y hasta jugó en la década de los '50. Recalcó que uno de sus tíos jugaba para Cincinnati.
LAMENTABLE
Athelstan dijo que ahora que está la época del mango, cuando no hay alimento, se come un par de esta fruta.
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