Luis Miguel creía que podía agarrar a los medios de relajo y hacerse el divo, pero le salió el tiro por la culata. Los emporios del espectáculo en México, Televisa y Telemundo, han censurado al artista que acaba de lanzar su disco "Cómplices", porque en una conferencia de prensa que ofrecería para hablar de la producción, puso condiciones de lo que debían preguntarle y qué periodistas. ¡Exquisito!
A María Celeste Arrarás, de Al Rojo Vivo, la planchó, y a todos los noticieros de espectáculo de Televisa también. Por ende, los dos canales prefieren no mencionar ni una palabra del artista, puesto que consideran que bueno o malo igual le dan "rating". Por fortuna suya, con todo ese escándalo, su disco se está vendiendo muy bien.
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