Chen, el izquierdo de 27 años que ha sorprendido a propios y a extraños, tendrá que enfrascarse con peloteros de la talla de Tadahito Iguchi, Paul Konerko y Carl Everett, armas letales en la ofensiva de los Medias Blancas, que marchan en estos momentos en la cima de la división Central de la Liga Americana, con marca de 24 victorias y 9 derrotas (sin incluir el juego de anoche).

Hasta aquí no termina la presión para el panameño que debutó en las Grandes Ligas hace siete años atrás. Chen tendrá que compartir el "potro indomable" con la nueva estrella de los Medias Blancas, Jon Steven Garland, quien está invicto esta campaña en seis presentaciones.

Garland, un tirador derecho de seis pies y seis pulgadas de estatura, ya suma ocho juegos seguidos desde el año pasado.

MATADOR DE GIGANTES
A pesar de todos estos obstáculos, Chen ha demostrado este año que no le teme a nada ni a nadie, lo que lo ha convertido en un verdadero matador de gigantes.

"Para muestra un botón", dice el popular adagio.

De sus cuatro victorias, Chen ha conquistado una a costa de los poderosos Yankees de Nueva York y otra ante los Medias Rojas de Boston, estos últimos actuales campeones de la "Gran Carpa".

Frente a los Yankees, el izquierdo cubrió la ruta completa aceptando apenas una carrera y cuatro imparables.