Ustedes saben que para una buena salsa, se necesita bastante condimentos y ni el "Limón ni la sal" de Julieta Venegas le dieron sabor a su concierto.
Sí, el concierto lo abrió con el tema "Limón y sal", a eso de las 9:30 de la noche, con una escenografía y juego de luces sencillas. Algunas personas esperaban un concierto energético, pero por el estilo de sus canciones y la forma de ser de la artista, no lo fue. Recuerden que Julieta no es una "Showgirl". Es muy famosa por las letras de sus canciones y el estilo que le mete a los temas. La verdad, los presentes corearon varios temas como: "Eres para mí", "Me voy", "Oleada", "Lento", "Algo está cambiando" y otras. Hubo un momento, cuando interpretó temas no conocidos en Panamá, que la gente se sentía aburrida, pero apenas cantaba uno de sus éxitos, se formaba la "minieuforia".
EL SONIDO
Por primera vez, pude hablar por teléfono desde la tercera fila del Teatro Anayansi en un concierto, ya que el sonido era fiel, pero no era fuerte.
VEINTE PARES DE PIES IZQUIERDOS
A Julieta hay como que mandarla para Colón, para que coja swing. ¿Por qué? Pues, el estilo de ella es súper raro y va en sentido contrario a la música. Parecía que estaba sentada sobre su oído.
El concierto lo cerró con el tema "Andar conmigo", para concluir con su "show" de una hora y media en Panamá.
|