Las salinas de Aguadulce no solo se utilizan para la producción de sal, sino también son una fuente natural para curar infecciones en la piel.
César Ledesma, un salinero del lugar, cuenta que la tradición viene de sus antepasados, que al inicio de la producción de sal se percataron de sus milagros curativos.
Recuerda que cuando era joven le decían que si tenía hongos en los pies fuera a la salina, pues la concentración de sal, en combinación con el lodo marino, curaba toda clase de infección en la piel.
También sirve contra los dolores reumáticos, sobre todo, en las personas adultas.
Ledesma mencionó que solo se tienen que frotar con el agua salada en el área donde se tienen los dolores.
Recalcó que esto se realiza en los lugares que no se están utilizando para sacar la sal para el consumo humano o de animales.
A este lugar llegan personas de otros lados del país, incluyendo de la capital, que se quitan los zapatos para meterse en el lodo de las salinas.
EXPERIENCIA
El señor Alfonso recuerda que tenía un hongo en el pie que no se le quitaba y un amigo le recomendó que fuera en las tardes a la salina.
Asegura que no hay mejor tratamiento para este problema, pues él fue por una semana y el hongo desapareció.
"Ya sé cuando me da otra infección en la piel, voy a regresar a las salinas", aseguró.
TRATAMIENTO
Este tipo de tratamiento se tiene que realizar solo en el verano cuando ya el sol ha cuajado la sal, porque en el invierno la salinidad se va debido al agua lluvia y no tiene el mismo efecto.
Recomienda Ledesma que sea en horas de la mañana, especialmente de 9 a 10, cuando el agua empieza a calentarse. Agregó que también es bueno a eso de las 3 de la tarde cuando el agua no está muy caliente.