Uno de los primeros en comprometerse a apoyar a Jackeline fue su antiguo jefe, Rodolfo Naranjo, quien desconocía por completo la paupérrima situación.

Al llegar con las donaciones de ocho hojas de zinc y varias colchonetas a su casa, Jackeline y sus hijos no podían ocultar la alegría que los embargaba, pues nadie se había preocupado por darles nada.

Pero para esta humilde mujer lo más importante que le pudo pasar es que su donante le ofreció un trabajo, con el que podrá solventar un poco la situación económica de su hogar.

Aunque solo son por tres días a la semana, en donde recibirá un pago de B/10.00 diarios por limpiar unas oficinas, ella se siente feliz.

Otros lectores se hicieron presentes y le hicieron llegar a esta familia, que reside en un caserón en calle 9 Pueblo Nuevo, un supermercado con muchos víveres para los niños.

Otro que se sumó a la lista fue el concejal de Pueblo Nuevo, Carlos "Tito" Lee, quien se presentó a la casa y prometió que le repararía parte de la vivienda.

Además, se comprometió a entregarle dos camas 3/4 en donde las niñas podrán dormir plácidamente.

En medio de su tragedia, Jackeline sabe que siempre hay una luz al final del túnel y en medio de lágrimas agradeció a todos los que la ayudaron.

VIGILANTE
Ante la promesa del concejal de reconstruir parte de la casa, DIAaDIA estará pendiente de que se cumpla.