Gladys López, una de las afectadas, dijo que en las últimas semanas el servicio ha desmejorado considerablemente y manifestó que hay días que tienen que esperar hasta dos horas en la terminal.

El transportista Gilberto Monterrey admitió que se han dado irregularidades en el servicio porque hay dos unidades dañadas, lo que les ha obligado a funcionar con sólo cuatro vehículos que no responden a la demanda de personas.