Aunque es un pequeño negocio considerado como buhonería, tiene un gran valor, porque es familiar. Desde hace un año, don Anacleto García, de 43 años, con su esposa Florisenda Harris, se dedicaron a la venta de collares, pulseras y sortijas que hacen con sus propias manos. Antes le ayudaban a un amigo con el negocio, pero decidieron independizarse y tener lo suyo, porque reconocen que cada día la situación económica está peor y lo poco que tenían no les alcanzaba.
Hoy día, se encuentran ubicados en La Peatonal. Según García, desde las 3:00 de la tarde hasta las 7:00 de la noche, están vendiendo sus productos. Dijo que su esposa se encarga del negocio cuando él no está, porque además trabaja en una lavandería.
Los materiales que utilizan para la confección de estas prendas son simplemente coco, chaquira, una piedra llamada ojo de tigre, caracoles, bambú, los cuales muchas veces se los traen de San Blas y Darién.
Esta pareja es la que abastece a empresas mayoristas del área que han visto su trabajo como un gran arte. Sus productos son gustados, principalmente por los jóvenes. Sin embargo, García señaló que reconoce que la mejor clientela sólo llega para la época de las quincenas y que tiene buena venta.
Su única hija y su pequeño nieto son su adoración.
Además de trabajar en La Peatonal, decidió también vivir con su familia en el lugar, para la mejor transportación de sus productos.
García agregó que en un día pueden obtener de 10.00 a 15.00 balboas, dependiendo de la clientela.
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