Organice su día sin exprimirse. Evite plantearse metas demasiado altas que no podrá cumplir.

Cuando sienta que se está desesperando, deténgase. Ejecute algunos movimientos conscientes y vaya despacio.

Escápese por un breve tiempo para organizar sus ideas. Divida las tareas fuertes en varias asignaciones pequeñas.

Descanse y estírese, es fundamental. La música puede ser útil para calmarse, incluso como fuente de inspiración. Tenga a mano un radio personal para escuchar su música, sin molestar a nadie. Recuerde que no hay que buscar la perfección en todo.