Te digo esto, porque hace meses conocí a un chico que es muy guapo e inteligente, pero sobre todo, parece honesto, sincero y decente. Uso la palabra parece, porque desde que mi ex me dejó, no puedo confiar en nadie y siempre me la paso sola y amargada.

La cosa es que este chico, cuando voy a entrar a mi salón en la universidad, siempre está allí para darme un hola; pero de manera tan respetuosa y cariñosa, que cuando no lo veo tengo que reconocer que me siento mal. Hace unos días, Robin, como me dijo que se llama, me invitó a comer un helado y no acepté, ya que no quiero herirlo. Él es muy tranquilo, me dijo que no me preocupara, que esperaría, pacientemente, el día que le dijera que sí. Eso me hizo sentir mal, así que en la siguiente semana, cuando me invitó a tomar un té en la cafetería, lo acepté. Moza, él tiene todas las cualidades que te dije, pero no sé, la verdad estoy confundida, no quiero abrir mi corazón a alguien que me vuelva a herir. Ayúdame.

DATE UNA OPORTUNIDAD
Hola Deyanira, me alegra que me escribas. Quiero decirte que tu historia me gustó mucho, pues puedo notar que, nuevamente, tendrás la oportunidad de rehacer tu vida, o por lo menos encontraste a un buen amigo.

Te digo esto, porque me afirmas que ese chico tiene tantas cualidades y no podemos esperar menos; por eso te pido que no cierres las puertas de tu corazón, ya que si el otro te hizo daño, no significa que éste haga lo mismo.

Mira, ya es hora de dejar el pasado atrás y volver a empezar, porque el que no se arriesga, nunca llega a tener nada y eso es lo que te pasa. Si sigues alejando a las personas de ti por lo que te hizo ese hombre, esa amargura que dices que tienes crecerá y cada día será peor. Piénsalo.

Otra cosa, nadie es perfecto, todos cometemos errores, por lo que no seas tan exigente. ¡Suerte!