La selección de Brasil presentó ayer sus cartas credenciales con vistas al Mundial de Alemania y goleó 4-0, sin despeinarse, a una combativa Nueva Zelanda, que nunca dio sensación de poner en peligro el triunfo abultado de los actuales campeones.
El madridista Ronaldo, en su partido 99 con la camiseta de Brasil, abrió el marcador al filo del medio tiempo con un disparo desde dentro del área, tras recibir un pase de Kaká. El gol significó igualar con Romario como segundo máximo goleador en la historia de Brasil (70).
En este encuentro, los hombres de Carlos Alberto Parreira tardaron en encontrar la puerta contraria, pero una vez lo hicieron, todo fue un carnaval de juego por parte del equipo "canarinho".
Adriano, ya en la segunda parte, puso el 2-0 en el marcador. Una espléndida jugada la del delantero del Inter de Milán, que tras librarse de su marcador lanzó un tiro duro y seco, que se coló de forma irremisible por el lado derecho de Glenn Moss, portero neozelandés.
Cuando unos y otros daban por bueno el 2-0, llegó el gol de Kaká y poco después, tras una acción de Lucio que acabó en la red, Junihno, en el descuento, puso el definitivo 4-0.
AVISO
Un resultado que confirma las pretensiones de los de Parreira en este Mundial: revalidar el título.
|